La opinión popular sobre este tema parece estar bastante clara. El becario es «mano de obra barata» cuyo puesto de trabajo conlleva precarias condiciones laborales que solo beneficia al empresario. Ser becario se ha extendido como una situación laboral negativa. Pero nuestro despacho no está del todo de acuerdo.
Quizás la condición económica que pesa sobre el período de beca que se le otorga a alguien, es lo que hace que se piense en este tipo de contratación como algo óptimo sólo para el empresario, sin embargo, desde nuestra experiencia podemos constatar que un puesto de becario no es ventajoso únicamente bajo el prisma empresarial.
De modo que hemos redactado una serie de razones por las que un puesto como becario puede ser favorable tanto desde el punto de vista del empresario como del trabajador. Sobre todo para la pequeña y mediana empresa y para el universitario o recién titulado sin experiencia laboral.
Ventajas de un contrato de becario para la empresa y el trabajador
Un puesto de trabajo como becario está definido como cualquier otro en la empresa, por lo que:
- Es una manera viable de que el trabajador compruebe y demuestre su valía.
- El empresario pruebe “el talento” del trabajador.
Este tipo de contrato tiene un periodo determinado lo cual es una OPORTUNIDAD para ambos de encajar el puesto laboral a las competencias personales del trabajador. Esto nos lleva a los siguientes puntos.
Cuando buscas contratar a alguien puede que una entrevista de 15 minutos no sea suficiente para determinar y evaluar el potencial de la persona entrevistada. Por eso, ofrecer un puesto de becario en tu equipo te ayudará a reforzar tu decisión o replanteártela. El margen de error es menor.
A la inversa ocurre que el estudiante conoce parcialmente la funcionalidad de la empresa, lo que tener un tiempo de conocimiento previo para adaptarse a ella y conocer el trabajo real y diario de diferentes áreas, le ayudará a definir qué es lo que quiere tras sus prácticas.
El becario proporciona una ayuda adicional que cederá al resto de empleados, más tiempo para realizar sus tareas diarias. Esta incorporación será algo PRODUCTIVO para todo el equipo, ya que la ayuda es recíproca.
El becario también va a participar, observar y acompañar a los trabajadores más experimentados en la elaboración de ideas, procedimientos administrativos, ejecución de labores, etc., y de esta forma poder iniciarse laboralmente.
Muchas veces el talento se va a “grandes marcas”, pero al ofrecer un puesto de becario:
- Lo que le mueve al estudiante es aprender y muchos prefieren hacerlo en empresas pequeñas donde ganas experiencia, ampliar habilidades, aportar ideas, resolver problemas, etc..
- El empresario puede aprovechar un período de beca en el que captar a un futuro profesional altamente cualificado.
¿Has sido becario? ¿Qué opinas? ¿Eres empresario y apuestas por este tipo de contratos? ¿Por qué?
Cuéntanos cuál es tu punto de vista.